11. Una especie de confesión.

-Entonces, al comienzo de la prueba…-

-VEREMOS CUÁNTO AGUANTA…

-¿EL QUÉ?

-MI POLLA EN TU GARGANTA.

Laau le dio tal hostia a Shini, que hasta los osos pardos se le encogieron los huevos (?) Ichi no paraba de tiritar del frío a pesar de que llevaba OCHO MIL ALFOMBRAS de las de Aladdín enroscadas por el cuerpo, y no solo eso, parecía ser que tenía mucho miedo a la oscuridad. Cada uno disponía de una linterna, sin embargo.

-¿ICHI, POR QUÉ NO HABLAS?- preguntó Shini, con gran preocupación. (?)

-PORQUE LA HAS ASUSTADO CON TU POLLA EN SU GARGANTA, IMBÉCIL- respondió Laau, la respuesta era más que obvia para ella (?)

-BLASFEMIA, ES PORQUE TIENE FRÍO.

-TENDRÍAMOS QUE HABERLE COMPRADO UNA BATAMANTA.

Mientras Shini y Laau discutían seriamente sobre la futura batamanta de Ichi, los chicos estaban escandilados todos con su personalidad natural (?). Zero exhaló un suspiro lleno de irritación y se adelantó. Todos los grupos ya habían empezado menos ellos. Encendió su linterna y se adentró en el bosque. Laau se dio cuenta y…

-¡UN HUSKY!

Zero emitió un quejido puesto que Laau había chocado de bruces contra él.

-¿¡QUÉ PUÑETAS SE SUPONE QUE HACES!?

-POR FIN TE DIGNAS A HABLARME.

El peliplateado volvió a darle la espalda y empezó a caminar de nuevo. Lo que Laau notó levemente en su orto (?) es que estaba siendo TOTAL Y COMPLETAMENTE IGNORADA.

-¡ZEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEERO, TÚ Y YO TENEMOS QUE HABLAR DE HOMBRE A HOMBRE!

Este intentó seguir ignorándola.

-¡ZEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEERO!

-¿¡DESDE CUÁNDO LAAU ES UN HOMBRE!?- gritó Shini, escuchando a su hermana.-ENTONCES AQUELLAS NOCHES LOCAS QUE TENÍAMOS…OH DIOS MÍO, ESTOY EMBARA…

-¡Ualuealuealeuale ualuelaelaellalea, alsualsualualauusualulus, alsualsualualauusualulus!

A Shini casi no le digo un algo (?) al escuchar tal maldición en árabe (?) que había soltado...

¿¡ICHI!?

-¿ICHI, QUÉ COÑO HAS DICHO?

-ES QUE TENÍA QUE CENSURAR LO QUE IBAS A DECIR.

-¿Y POR QUÉ *CENSORED* NO UTILIZASTE LO QUE ME ACABAN DE HACER?

-¿EL *CENSORED*?

-EL MISMO.

-NO SÉ, ME HA SALIDO DEL ALMA.

-Eh..chicas...

-¿¡QUÉ!?-le chillaron a la vez Shini e Ichi a...Ryner.

-QUE VUESTRA HERMANA SE HA LARGADO.

.....

Y efectivamente, ni Laau ni Zero estaban ya. Solo veían oscuridad.

-¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAH NO PUEDE SEEEER!

-IMPOSIBLE IS NOTHING.- dijo Ichi.

-CARAJO, TENEMOS QUE IR A BUSCARLA.

Shini, agarró la primera mano que vió. Lo mejor fue, que se había pensado que era la mano de Ichi, pero cuando ya hubo corrido lo suficiente y ya se habían alejado bastante de los demás...

-¿¡RYNER!?

-¿¡POR QUÉ ME HAS COGIDO ASÍ DE REPENTE Y TE HAS ALEJADO DEL RESTO!?

-¿¡RYNER QUÉ HAS HECHO CON ICHI!?

-QUE ME HAS COGIO A MÍ, NO A TU HERMANA.

-RYNER, LA VAMOS A LIAR PARDA ¿EH? CONFIESA.

Pero Shini se cayó al ver que el castaño tenía razón. Miró a su alrededor y solo veía árboles y más árboles y todo estaba muy oscuro. Y entonces...

-¡IMPACTRUENO!

Gritó, a la vez que encendía la linterna. Ryner pensó que ella caería en pánico...

Pero ya vio que no era así (?)

-Mientras…-

-¡USUI TAMPOCO ESTÁ!

Desde que su hermana Shini se había ido en busca de Laau, Ichi ya se había dado cuenta desde un principio que Usui había desaparecido en el mismo instante que Laau había ido a buscar a Zero. Estaba sola. SOLA. SOLA CON GERARD.

-Aleluya de fondo (?)-

-Será mejor que vayamos a buscar las pistas, quizás así les encontremos.- propuso Gerard, encendiendo su linterna.

Ichi asintió, el pelinegro parecía muy seguro de sí mismo y bastante tranquilo. Sin embargo, ella intentaba encender su linterna y…

-MECAGOENMIPUTAMADRE.

-¿No sabes encen…?

-SÍ SÉ ENCENDERLA, TÚ CAMINA Y YO TE SIGO.

Gerard se encogió de hombros, mientras una pequeña sonrisa aparecía por sus labios. Caminó y se limitó a iluminar el camino, pero a los minutos…

-¿GERARD, DÓNDE ESTÁS?

-Estoy aquí mismo.

-NO TE VEO.

-¿Por qué no enciendes tu linterna?

-ESTÁ ROTA.

El de ojos verdes movió su linterna y la guió a cualquier lugar y…

-HE VISTO LA LUZ.

Encontró a la castaña. Avanzó hasta ella y la agarró de la mano. Ichi parpadeó dos veces seguidas, notando que la mano de Gerard estaba más caliente que la suya, y era un tacto que le gustaba y que la hacía sentirse más segura. Con timidez, dirigió la vista al suelo, mientras que Gerard, sin decir nada y avanzado con ella en silencio, se adentraban más en el bosque.

-IM SEXY AND YOU KNOW IT.

Shini canturreaba mientras intentaba buscar las pistas con Ryner. Este la seguía, sin saber si reírse por las ocurrencias de la castaña, o llorar porque sabía que no saldrían de allí tan fácilmente.

-¡RYNER, MIRA!

Ryner miró adonde señalaba Shini, y vio en un árbol algo alto, un papel que colgaba de una rama. Aquello tenía toda la pinta de ser una pista, puesto que tenía el número 4.

-¡ES UNA PISSSSSSSSSSTA!

Shini, emocionada, corrió hasta el árbol mientras apuntaba con la linterna. Trepó como cual mono (?) e intentó agarrarse de la rama para coger la pista. Ryner, sorprendido, corrió hasta el árbol.

-¡Shini ten cuidado, estás a mucha altura!

-¡NO TE PREOCUPES, SOY UNA MUJER DE AVENTURAS!

De repente, aquella escena le recordó algo a Ryner. Muchos años atrás, cuando él apenas tenía seis o siete años…y una chica subida a un árbol. La manó le tembló sin él apenas darse cuenta, apuntando a Shini con la linterna, atento a sus movimientos.

-Shini, por favor, bájate…

-¡CREO QUE YA LA TEEENGO!- gritaba Shini, emocionada.-¡Estoy a punto de…!

Pero cuando ya la tuvo en sus manos, la rama se rompió. Al estar agarrada a ella, Shini gritó, mientras caía. Ryner se quedó inmovilizado en el momento que la rama se rompió, pero nada más escuchar el grito de Shini, aquello le sirvió para reaccionar de inmediato. Corrió hasta ella, se situó debajo…

Y Shini cayó en sus brazos, provocando que él también se cayera. La castaña cerró sus ojos azules con mucha fuerza.

-M-mierda…

Sintió entonces que los brazos de Ryner la estaban apretando con mucha fuerza contra él, al igual que también se fijó que tenía una pequeña herida en el brazo.

-Ryner…estás…

-No vuelvas a hacer eso.

Su voz fue tan autoritaria y seca, que Shini cayó. Y ante el silencio, pudo escuchar los rápidos latidos de su corazón.

Ryner había temido por su vida.

-En un lugar de la mancha, cuyo nombre no quiero acordarme…-

-ESTO ES PEOR QUE LOS ALPES DE HEIDI.

Laau estaba que echaba chispas (?) ya que se habían perdido y Zero la seguía ignorando. Infló los mofletes con indignación, arrancándole un pelo de su hermosa cabellera (?)

-¡ME CAGO EN TODO!- gritó Zero, sobándose la cabeza.-¿¡PERO QUÉ COJONES HACES!?

-¡ES QUE SOLO DÁNDOTE DE HOSTIAS ME HACES CASO!

-¡NO TENGO PORQUÉ HACERTE CASO!

-¡ME VAS A COMER TODO EL ZOLOTROCO!

-¿QUÉ CARAJOS ES UN ZOLOTROCO?

-¡EL COÑO DE LA SHINI EN ALMÍBAR!

-¡IMPOSIBLE HAS DICHO QUE…!- Zero cayó, ya realmente confundido (?)- Mejor déjalo.

-¡NO, NO LO DEJO, A MÍ NADIE ME DEJA, ZERO…!

Mientras gritaba, Laau no se daba cuenta que caminaba mirando hacia Zero y aproximándose hacia un barranco. Zero sí que se llegó a dar cuenta, porque había iluminado el camino con la linterna, por lo que reaccionó.

-¡ESTÚPIDA, NO AVANCES MÁS!

-¿¡CÓMO OSAS LLAMARME ESTÚP…!?

Pero cuando estuvo a punto de llegar al borde y resbalarse, Zero la agarró del brazo y tiró de ella hacia su cuerpo. Laau se sorprendió bastante, y del susto que se había llevado, no fue capaz de separarse de su mejor amigo. Se encogió y escondió en rostro en su pecho, agarrándole fuertemente de las mangas de su camisa. Ninguno de los dos dijo nada, hasta que Laau habló:

-Zero ¿cómo hemos llegado a esto?

-No sé lo que quieres decir.

-Sí lo sabes.- Laau se atrevió a alzar un poco la mirada hacia él, pero sin separarse.-Antes estábamos más unidos. Siempre me ayudabas y apenas te enfadabas conmigo..

-Y te sigo ayudando.- respondió Zero, con un suspiro cansado.-Pero hay cosas que no entiendo y que me irritan- Y tú nunca te das cuenta.

-¡Yo si que me doy cuenta!

-¡No, no te das cuenta!- el grito de Zero hacia ella hizo que la peliazul le mirase con los ojos más abiertos.-¡Últimamente defiendes a ese malnacido de Usui e incluso hoy le has apoyado! ¡De mí no te has acordado apenas!

-¡P-pero se había hecho daño!

-¡¡Me da igual!!- Zero la sujetó de ambos brazos.-¡¡Olvídate de ese imbécil!!

-Nunca…nunca me habías gritado cuando hablamos en serio…

Zero vio como lágrimas salían de aquellos ojos azules que tanto había mirado desde que era un niño. Se maldijo a sí mismo, y lo que hizo, no fue con palabras. Se dejó guiar por sus impulsos por primera vez. Para Laau todo fue muy deprisa. Sintió que unos labios invadían los suyos fieramente, pegando su cuerpo contra el chico que creía ser su mejor amigo que ya había dejado de ser desde hacía mucho tiempo el de un niño. Aquel beso era completamente distinto al que ya le había dado. Por su mente pasaron millones de recuerdos de los dos, pero incluso la imagen de otro chico vino a su mente, hasta que…

Una luz les iluminó.

Laau se separó con fuerza de Zero, aún con lágrimas en los ojos.

Y la cara fría y distante de Usui la dejó sin aliento.

-Vaya. Creo que he interrumpido vuestra diversión.

Lo más difícil estaba a punto de comenzar.