lunes, 5 de diciembre de 2011

8. La competición. (Parte 2)


-En la competición.-

-TODOS A SUS PUESTOS.

-SI LLEVO EN ESTA POSTURA MÁS DE MEDIA HORA.- se quejó Shini, que estaba en la línea de meta justo a Ryner desde hacía DÓS mil años. (?)

-TRES, DOS, UNO…

Una vez dieron la señal, todos empezaron a correr. Ichi estaba que se mordía las uñas como una posesa (?) escupiéndolas al rato, y después se las volvía a morder. Mientras tantos, Shini hacía LO IMPOSIBLE Y POSIBLE –sí, todo a la vez.- para coger un saco cualquiera, donde se suponía que estaba el disfraz, y adentrarse en la gigantesca tienda de campaña que estaba a oscuras.

-NO VEO UNA MIERDA.

Ese fue el primer problema que se planteó. Procuró llegar la primera para que no la vieran cambiándose. Pero entonces…

Notó una espalda DESNUDA, que había chocado con la suya. Se giró un poco, no sabía quién era y tampoco podía verle, pero reconoció su voz al disculparse.

-Joder, lo siento.

Miles de micro-Shini’s acudieron a la mente de la susodicha, chocándose entre ellas y tirándose de los pelos. (?) ERA NADA MÁS Y NADA MENOS QUE RAINAAAH.

Bueno, Ryner, lo mismo era para la castaña. Ella no contestó para que el otro no le reconociera, pero mala fue su suerte que el chico insistió.

-Oye ¿estás…?

-QUE SÍ, QUE ESTOY BIEN.

Ella no pudo verlo, pero el de ojos oscuros se sonrojó en la oscuridad al descubrir que era Shini.

-¿S-shini?

-Has como que no me has visto.

-SI NO TE PUEDO VER.

-LO SÉ, PERO POR SI ACA…

Entonces, un montón de chicos del instituto empezaron a entrar. Shini se puso nerviosa, intentando buscar su disfraz a duras penas. Distinguió algo así como un traje completo, por lo que en realidad no sería tan difícil de poner. Sin embargo, no quería ser encontrada por otro chico, ya que estos la mayoría asistieron a la prueba para poder encontrarse alguna chica allí. Iba a irse a una esquina, cuando Ryner la agarró del brazo.

-Espera, ven conmigo.

Pero la respuesta que recibió Ryner, fue que Shini le mordiera el brazo.

-¿¡QUÉ PUÑETAS ESTÁS HACIENDO!?

Los chicos intentaron mirar –ya que estaban a oscuras- el origen del grito. Ryner le tapó la boca como pudo y se la llevó a una esquina. –cejas, cejas.- (?)

-SHHHHHH ¿QUIERES QUE TE DESCUBRAN?- murmuró en voz baja.

-LJSFKLJASLFKJALKJFD.

Ryner le soltó, ya que aquello era peor que Arameo (?) y Shini, al verse por fin liberada, le empujó. Aunque no pudo, porque al tocar su torso sin camisa pues se le fueron todas las fuerzas por el ano. (?)

-G-gracias, puedes irte.

-Me cambiaré de espaldas a ti, pero si estoy frente tuya ningún chico se va a acercar. Así que puedes cambiarte tranquila.- dijo Ryner sonriendo, a pesar de que la chica no le viera.

Shini asintió mientras se cambiaba. Su corazón, iba latiendo a mil por hora. La presencia de Ryner, le resultaba a la vez muy conocida y desconcertante.

Y al castaño, también le ocurría lo mismo.


Después de que se pusieran los trajes, Shini, Ryner y Gerard salieron de la aglomeración de alumnos. Shini se miró su propio traje…

Iba, ni más ni menos, que de…

-¿QUÉ COÑO HACE SHINI CON UN TRAJE DE GATA?- Ichi estaba que no se lo creía. (?)-QUE ALGUIEN LA COJA QUE ME LA VIOLAAAAAN.

-PUES EN REALIDAD NO ME QUEDA MAL.- asintió Shini, satisfecha (?)

Echó un vistazo a Ryner. Este, estaba disfrazado de bufón, una especie de bufón de color rojo.  Shini se sonrojó ENTERAMENTE, al verle tan adorable. Su cara fue un MOTHER OF GOD, integral, aunque su mente decía:

PORQUÉ, RYNER, PORQUEEEEEEEEÉ.

Sin querer, se le había quedado mirando y el castaño la miró también. Sus labios se entreabrieron al verla vestida de tal forma. Ambos desviaron la mirada a la vez. Mientras, Gerard iba de…

-S-s-s-s…..-Ichi no podía acabar la frase porque era analfabeta (?).-¡S-S-S-S-S-SOLDADO!

Muchas chicas se sorprendieron y cayeron rendidas al ver al pelinegro de ojos verdes vestido con un uniforme militar de color azul marino, con complementos incluidos, como por ejemplo la gorra. La carrera siguió, y Shini no podía estar pendiente de ganar porque con Ryner por ahí era una puta distracción (?) por lo que…

-¡Y GERARD WALKER HA GANADO SEÑORES!

El resto de los chicos y el rechazado de 100 veces de Ichi se cagaron en toda la descendencia Arukuriana (?) y Walkeriana también, ya que había ganado Gerard.

-Y EL PRIMERO VA PARA WALKER, PODRÁ CONSEGUIR EL BESO DE LA SEÑORITA ARUKU-SAN.

Ichi se bajó del trono, temblando, hasta que Gerard se le acercó a ella con una sonrisa amplia. La castaña de ojos rojos no supo que hacer, y lo único que hizo fue cerrarlos, esperando que le diera el beso. Shini estaba que se arrancaba los pelos del orto (?) para ver si la violaba en directo. Pero al final se quedó en…

Un beso en la frente.

Ichi abrió los ojos, sus mejillas tomaron un nuevo color, sin apartarse de los ojos verdes del otro. Este aún, no había perdido su sonrisa.

-¿P-por qué?- pregunta inteligente de Ichi.

-Aún no es el momento. Pero espero que hasta entonces, no beses a nadie más.

Ichi asintió, avergonzada.


-En la enfermería-

-AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAARRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRG.

Usui dio gracias al cielo de que los pasillos estaban completamente desiertos, y así no escucharan los gritos apocalípticos de Laau.

-Laau-chan, parece que estás pariendo.

-¡ES QUE ME PONES MUCHO ALCOHOL!

Entonces, Usui , que tenía sujeta su pierna, le besó la rodilla.

-¿Mejor así?

Como respuesta, Laau le dio una patada.

-¡VETE AL INFIERNO!

Pero, como buen seme (?) Usui la esquivó.

-Pues ven conmigo.

-NI DE COÑA.

-¿Zero es amigo tuyo?

Laau se calló de repente, sin saber qué decir.

-Sí, es amigo mío.

-Desde la infancia, por lo visto.

-¿ME ESTÁS HACIENDO UN INTERROGATORIO O BUSCANDO SOBRE MI VIDA?

-Ya te dije una vez que sabía mucho de ti. Por lo que no tengo necesidad de hacerte un interrogatorio.- terminó de curarle las heridas.-Pero no voy a negar que intento llegar hasta a ti.

-¿Llegar hasta a mí?- Laau parpadeó.

Usui soltó una risita por lo bajo, levantándose. Antes de irse de la enfermería, acarició el pelo de esta, inclinándose un poco a su oído para susurrarle.

-Haré que te enamores de mí.

Y después, reinó el silencio en la enfermería, ya que Laau, se quedó sola.

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